Arq. Diego Fabián Bolaños Sarria
Especialista en Proyecto Urbano USB
Magister en Gobierno y Políticas Públicas
Decano Facultad de Arquitectura
FUNDACIÓN UNIVERSITARIA DE POPAYÁN
© Publicado en marzo de 2018. Artículo exclusivo de la Revista Zona Urbana.
La ciudad es uno de los productos más extraordinarios que ha creado la humanidad. Por definición es multifuncional, concentra la diversidad, y está en permanente construcción-reconstrucción, porque nunca se acaba; se trata de un “producto social” en proceso de cambio constante que tiene historia. (Carrión, 2001, p. 7)
Cada espacio en una ciudad -y cada lote de terreno- tiene potencialidades diversas para sostener procesos de uso en áreas para construir y también para preservar. Estas diferencias no dependen en principio ni del propietario del terreno, ni del constructor, ni del usuario final de manera individual: están asignadas por un proceso general que pareciera, escapa al control de cada uno de estos agentes. Pero, en las ciudades que se proyectan a mediano y largo plazo, esta determinante puede cambiar. En el caso de Popayán - en franca coyuntura con la modificación de su P.O.T. o Plan de Ordenamiento Territorial-, existe el ambiente propicio para que exista una articulación entre distintos agentes, donde el mercado no sea necesariamente el único mecanismo que asigne las reglas y determine mayoritariamente el precio del suelo y las rentas derivadas del mismo.
Modificación del P.O.T. y gestión participativa
Con la modificación del P.O.T. se abre la posibilidad de conformar un proyecto político de relación con el territorio. Es una oportunidad para que la administración pública trabaje conjuntamente con constructores, promotores, planificadores urbanos, academia, colectivos y ciudadanos, utilizando mecanismos de gestión participativa en lo técnico y financiero para el desarrollo integral del territorio.
Es importante comprender que el P.O.T. entró en la tradición colombiana en los últimos 20 años y por tanto, el marco actual de su revisión es muy diferente al de dos décadas atrás. Esto, redefine el conjunto de perspectivas y principios para una ciudad como Popayán.
Una visión de largo plazo
Las superficies cambian más aceleradamente que antes, modificando los usos del suelo con sus correspondientes vocaciones, lo que deriva en la renovación de precios y rentas. Por ello, se debe establecer una nueva modalidad de planeación que aspire a concretar una visión de largo plazo en el desarrollo urbanístico, teniendo en cuenta la dimensión deseada del territorio, en por lo menos 12 años. El volumen del territorio de Popayán vive un proceso de crecimiento dinámico, siendo ideal para estructurar un buen plan en diferentes escalas:
-Rural: integración a las dinámicas económicas urbanas.
-Urbano: superar el urbanismo predio a predio.
-Urbano regional: movilización del suelo público y privado para el desarrollo de proyectos estratégicos a nivel regional.
ILUMINACION INDIRECTA
La iluminación indirecta es un tipo de alumbrado que oculta la fuente de luz. Su uso, aporta un ambiente cálido y acogedor, creando un efecto de amplitud y realzando la arquitectura de los espacios interiores. Contraria a la luz directa, evita las sombras y busca una distribución uniforme. La iluminación indirecta aporta estilo a las paredes, techos y suelos. Para su uso, es preferible que las zonas superiores estén pintadas con colores claros.
El uso de iluminación directa e indirecta se puede combinar en el mismo espacio. Para este fin, existen distintos tipos de lámparas y fuentes como la Luz LED que además de un bajo consumo de energía, nos permite ahorrar dinero y preservar el medio ambiente.
Un elemento a tener en cuenta es que la iluminación directa o indirecta se debe utilizar con moderación en nuestra casa y no deben incluirse en todos los espacios porque podría saturarlos.
ILUMINACIÓN EN EXTERIORES
Para iluminar correctamente una fachada, un jardín o una terraza debemos tener en cuenta que la luz fría o luz blanca nos brinda un efecto más luminoso con una menor exposición; aportando un ambiente exterior con estilo. Otro tipo de fuente es la luz amarilla que brinda una sensación de calidez.
Existen dos tipos de luces que son las más utilizadas en exteriores:
- Lámparas halógenas: emiten una luz muy blanca y brillante similar a la luz natural. Al ser regulables, nos permite cambiar los niveles de luz artificial. Se instalan en paredes o pisos.
-Lámparas fluorescentes compactas: ayudan a proteger el medio ambiente y son excelentes en cuanto al ahorro de energía. Pueden encontrarse en diferentes tonos como luz día, neutro y cálido.
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